jueves, 28 de junio de 2007

Segundo round

La quimio aún no se puede aplicar, una bacteria intrusa que me martirizó desde el Martes en la noche, cuando literalmente me quería morir, pues, tosí toda la noche sin parar, ayer cuando llegue a la clínica tenia fiebre y me sentía pésimo, me hicieron millones de exámenes y al parecer es la bacteria.

Ojala mañana pueden empezar la quimio, estoy aislada, incluso al Maxi que me vino a cuidar la doctora le dijo que mejor se fuera por que estaba un poco resfriado.
Estoy en el piso 10 aquí hay hartos pelado, a mi se me cae el pelo a montones pienso que me voy a pelar, de una vez pero, con maquina.
Las drogas o el cancer, no se, te dejan un olor extraño, yo me lo siento es como característico de esta enfermedad.
Bueno una manera de evadir la mentes es recordar el pasado y hoy voy a volver a mi niñez en Punta Arenas.
Yo tenia los nonos que Uds ya conocen y mis abuelos por parte de mi papá, desgraciadamente, no tengo fotos de ellos conmigo de chica, pero si, les puedo contar que mi abuelo Casiano, era marino, murió joven pero yo tengo una imagen como una foto de él, alto y fuerte y yo en la Plaza correr a sus brazos.
Mi abuela era una persona especial, muy generosa con nosotras y la tuvimos muchos años después que el abuelo se fue, incluso viví con ella y mis tíos, cuando vine a la universidad.
Yo fui a la Escuela Yugoslava, era escuela pública con número donde de yugoslavo solo tenia el patrocinio de Yugoslavia (en ese entonces), que daba un premio a fin de año. Los niños que asistían, eran muy modestos, de familia humildes y de mucho esfuerzo, siempre recuerdo las manos hinchadas y rojas de algunos compañeros por el frio, que se peleaban por una taza de leche caliente y un pan que repartían como desayuno.


Luego pase a humanidades al Liceo de Niñas, siempre me ha gustado estudiar, tenia buenas notas, mis debilidades eran canto y gimnasia, yo sufría, me eximía de los ramos más difíciles y daba examen en esos dos ramos.



En el liceo lo pase muy bien, especialmente el último año donde teníamos un equipo, que nos juntábamos a estudiar, a fumar y comer tostadas quemadas, salíamos a pasear a la calle Bories e íbamos a algunas fiestas, también nos creíamos modelo y participabamos en desfiles sociales locales.

Luego la prueba de aptitud y la vida nos mando a estudiar a distintos lugares de Chile.



Con cariño

Tatiana

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Tatiana.. te acompaño en tu camino.. sigue adelante
¡¡Fuera bacteria!! Cariños Cristina

Anónimo dijo...

Como aparezco en los créditos ( la colegiala de la derecha, con unos lentes que entonces no usaba pero ahora sí), intervengo en esta vuelta. Es sorprendente el grado de amistad que logramos en tan poco tiempo. Expulsada yo por las hermanitas, debido a mis constantes rebeldías,que no eran más que la expresión del tedio. llegué al exilio del Liceo de Niñas. No fui excepción, ese cambio me aportó mucho.Y tu amistad, Tatiana, fue y sigue siendo tan enriquecedora. Nos reimos tanto, reflexionamos y jugamos. Pero debo aclararte que ¡jamás compartí contigo y con Angélica Imperatore (¿dónde está?) ese frívolo paso por las pasarelas donde ustedes disfrutaban luciendo el fìsico.
Yo era más baja, más gordita y más intelectual, no estaba para esos trotes.
Eras entonces, siempre, muy equilibrada, ponderada, nada de excentricidades ( salvo las pasarelas). Juiciosita. Buena amiga. Así que encontrarte al paso de los años fue como seguir la conversación del día anterior. Tengo muchas ganas de verte.
(Aquí Patricia Stambuk M).